¿QUIEN
ES ESTE MELQUISEDEC? #34
La
Nueva Naturaleza
11 de
Enero del 2000
El pasado domingo exploramos la naturaleza del viejo hombre y
cómo es que esta identificada en las Escritura por varios nombres de las que es
llamada la carne, entonces el viejo hombre y el hombre exterior así como el
hombre natural o corazón natural, y finalmente es llamado la mente carnal.
En esta noche a mí me gustaría explorar al nuevo hombre o el
espíritu nuevo el cual es hablado en Sn. Juan
3:6.
En Juan 3:6 leemos, "Lo que es nacido de la carne; carne es, y lo que es nacido del
Espíritu, espíritu es".
Es un gran y bendito hecho que hay algo Divino así como
humano; algo engendrado por Dios así como por el hombre. Hay
"espíritu" así como hay "carne". "El que nace del
Espíritu es espíritu" (Juan 3:6). Esta nueva naturaleza tiene, como la vieja, varios nombres.
Éstos están de pie en contraste y oposición uno al otro.
1.) Es llamado "Espíritu". Ésto está en contraste con, y oposición a, la
"carne," como el título de la vieja naturaleza: y es llamada así
porque es nacida o es engendrada del Espíritu Santo (Juan 3:6). Como la
"carne" comparte de la naturaleza de Adán, siendo descendida de él,
el espíritu comparte de la naturaleza del Espíritu Santo: siendo nacidos de 'ek
tou pneumatos'..
2.) De esta nueva
naturaleza, siendo divina en su origen, es llamada 'theia phusis', Divina Naturaleza (2 Ped.1:4). Ésto es por qué se dice ser
"perfecto," e incapaz de cometer pecado. 1 Juan 3:9, "Todo aquel que es nacido de Dios no practica
el pecado, (como su fruto) porque la simiente de Dios (la nueva naturaleza) permanece en el (el nuevo hombre) y no puede pecar, porque es nacido de Dios". 1 Juan 18, 19,
"Sabemos que cada cosa que ha sido engendrada 1 de Dios no peca; pero él ([i.e]. el nuevo hombre) que ha sido engendrado de Dios1 8 le guarda, y el malo no le
puede tocar. Sabemos [como diciendo
la verdad] que somos, de Dios; 1 9 y, el mundo entero esta bajo el poder del
malo. La nueva naturaleza es personificada y hablada en el género masculino. No
puede referirse al creyente en conjunto; porque; si decimos que "no hemos pecado, le hacemos un
mentiroso, y Su palabra no esta en nosotros" (1 Juan 1:10): y nuestros pecados son proveidos 1 Juan 2:1, 2. Pero la nueva
naturaleza es nacida de Dios y no peca, y no queda en [el poder del] maligno.
La nueva naturaleza, por consiguiente, siendo "espíritu," y siendo
engendrada o producida en el creyente por el poder del Espíritu Santo, es
Divino. Es llamada:
3.) El Nuevo Hombre (Ef.
4:24; Col.3:10). Ésto está en
contraste con "el viejo hombre " que, como hemos visto, es uno de los
títulos de la vieja naturaleza. Este, siendo completamente nuevo, es llamado
"una nueva creación " (2 Cor.5:17; Gal. 6:15). Y es dicho
ser "según
la imagen del que lo creó" (Col. 3:10). Nada de ésto es útil en los ojos de Dios. Sin embargo los hombres pueden
"hacer una bella muestra en la carne," "la carne para nada aprovecha" [Juan 4:63);
"porque en Cristo Jesús ni la circuncisión ni cualquier cosa, ni la
incircuncision vale, sino una nueva creación " (Gal.4:15; Co.1. 3:10,11). En esta conexión la nueva naturaleza es llamada:
4.) "El Hombre Interior" (Rom.7:22;2, Cor. 4:16; Ef.3:16). Ésto esta en contraste con "el hombre exterior" que
perece día a día, mientras este hombre interior "es renovado día a
día." En Efesios
3:16, se da "el hombre
interno," pero el griego, y el significado es el mismo. En lugar de
perecer, se nutre constantemente y se llena día a día con gracia y fuerza por
el Espíritu Santo; de manera que Cristo mora así en el corazón por la fe [Ef. 3:16]; y podemos conocer algo de Su amor, y ser lleno de toda la
plenitud de Dios (5:19). Ésto explica Efesios 1:23; y muestra cómo la iglesia, la cual es el cuerpo de Cristo, es
"la plenitud de Aquel que todo lo llena [los miembros de Su cuerpo] con
todo [necesidad gracia espiritual y fuerza]." El hombre interior se
deleita en la ley de Dios (Rom.7:22). El otro "no está sujeto a la ley de
Dios" (Rom 8:7). El conflicto entre
ellos, debe seguir hasta que la muerte finalice el forcejeo. ¡Ésto es lo que
causó al Apóstol Pablo (y todo lo que tiene como fe preciosa) clamar, "Oh
miserable de mi! ¿quien me librará de este cuerpo de muerte?," o, como en
el margen este cuerpo de muerte. Lo genitivo, "de muerte," es
probablemente lo genitivo de relación, como en Romanos
8:36, donde el griego "oveja de matadero"
significa, y se da por "oveja para el ([i.e]., fijado para)
matadero." Así que aquí, "el cuerpo de muerte" es el
"cuerpo fijado para muerte" (Rom.5:12; Heb.9:27): y el clamor es,
"¿quien me librará de este esto?" y la respuesta triunfante es,
"Doy gracias a Dios [El me librará] a través de Jesucristo nuestro
Señor" (Rom.7:24). El próximo verso nos ensena con otro título.
5.) La Mente (Rom.7:23,25). La palabra usada aquí para "la mente" es 'nous' y
denota la nueva naturaleza, como también denota en el capítulo 7:23,25. Es usada en contraste con la "carne" (como
"espíritu" es), porque denota es lo cual es interior e invisible.
Esta "mente" sirve la ley de Dios (Rom.7:25) y se deleita
en él (5:22). "La ley de la mente" se pone para "la ley de
Dios" en el verso 23.
6.) Otro título es pneuma-Christou; Espíritu de Cristo, o
Espiritu-Cristo (Rom.8:9). No hay ningún artículo en el griego. Ésto no es otro nombre
para el Espíritu Santo. Ni es él un espíritu separado distinto del Espíritu
Santo, porque el "Espíritu de Cristo," como hombre, era psicológico;
y era, como tal, encomendado al Padre en su muerte (Lucas 23:46). No hay otro
Espíritu de Cristo. Pero este pneuma-Christou es la nueva naturaleza que nos
hace "hijos de Dios" como El es "el Hijo de Dios." En
Gálatas tenemos una instrucción más amplia acerca de la enseñanza de los
Romanos; y en Gálatas
4:6 tenemos la explicación de Romanos 8: "porque somos hijos, Dios nos ha enviado al [pneuma] de
Su Hijo en vuestros corazones, clamando, Abba, [i.e], mi Padre."
Pneuma-Christou es por consiguiente otro nombre para el
"espiritu-hijo" lo cual
tenemos en Romanos 8:15: no "el espíritu
de adopción," como en A.V., sino "un hijo-espíritu," [pneuma
whyothesias]. Así, la nueva creación dentro de nosotros es llamada
pneuma-Christou, porque "el Espíritu Santo Mismo da testimonio con nuestro
espíritu (o nueva naturaleza) que somos hijos de Dios; y, si hijos, entonces
herederos, herederos de Dios y co-herederos con Cristo (Rom.8:16,17). Se puede decir en verdad: "Ahora si cualquier hombre no
tiene pneurna-Christou (o la nueva naturaleza) no es de el" (Rom.8:9). Porque Cristo el Hijo de Dios, y todo los hijos de Dios
poseen el don precioso o un "espíritu del Hijo." Éso es por qué es
llamado pneuma-Christou, o Espiritu-Cristo. Siendo Hijos de Dios: con Cristo,
entonces somos "herederos también; no solo herederos de Dios, sino
co-herederos con Cristo; si es así que sufrimos juntos, seremos glorificados
juntos también" (Rom.8:17). Ésta es la preciosa
verdad llevada para este nombre la cual es dada a la nueva naturaleza. Es
llamada pneuma-Christou; porque es la señal y sello que es Espiritu-Cristo, y
por consiguiente un Hijo-Espíritu; porque "Porque a los que antes conoció,
también los predestino para que fuesen hechos conforme a la imagen de Su Hijo,
para que el sea el primogénito entre muchos hermanos" (Rom.8:29).¡Oh! que porción bendita es nuestra
como "hijos de Dios." ¿Nos damos cuenta que ese pneuma-Christou (o la
nueva naturaleza) marca nuestro derecho a este altísimo título? ¿Que no somos
meramente siervos, sino hijos? ¿no meramente el pueblo de Dios, sino el
"hijos de Dios"? ¿Compartiendo en todas las bendiciones de Su Amado
Hijo? Sí, Compartiendo en Su Hijo (Juan
1:12; 1 Juan 3:1-3). Su justicia perfecta (Fil. 3:9).
Su santidad (1 Cor.1:30). Su paz (Fil.4:7). Los propósitos confidenciales de su Padre (Ef.1:9). El
amor de su Padre (1 Juan 3:1). Su cuerpo de la resurrección gloriosa [Fil.3:21).
Su venida en gloria (Rom.8:17;
Col.3:4; 1 Juan 3:2). Mismo (1 Tes.4:17).
"Tan queridos, tan
amados a Dios, No podemos ser mas amados; Porque en la Persona de Su Hijo
nosotros somos tan amados como Él."
Y todo ésto porque Dios ha creado dentro de nosotros una nueva
naturaleza, la cual es llamada pneuma-Christou. Pero, entretanto, aquí en la
tierra, es nuestro privilegio compartir Su rechazo. "El mundo no nos conoce porque tampoco le conoció a
El" (1 Juan 3:1). Permitanos no estar
inclinados sobre ésto. Permitanos más bien regocijarnos de ser contados como
dignos de tan alta porción. Es exactamente en relación con este mismo hecho que
la cuenta de fe y espera y amor entra. "Pues tengo por cierto que las
aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que
en nosotros ha de manifestarse" (Rom.8:18). Este orden de las
palabras griegas nos muestra donde el énfasis es puesto, aunque el inglés del
A.V. se lee más fácilmente. El hecho de nuestro rechazo para un mundo
religioso, y para una iglesia mundana, debe ser a nosotros el sello bendito que
somos los hijos de Dios, y por consiguiente participantes del Espiritu-Cristo,
o la nueva naturaleza, lo cual es el don de Dios.
Esto esta en este mismo verso (Rom.8:9), y en relación
con este nombre para la nueva
naturaleza, se le da otro nombre. Es llamada:
7.) Pneuma-Theou, o espíritu Divino (Rom.8:9,14). El griego es
literalmente "espíritu de Dios." No "el Espíritu" (porque
no hay ningún artículo), sino "el espíritu de Dios"; o, como lo
daríamos, espíritu Divino. Las dos ocurrencias de esta expresión en este
capítulo nos dicen todo lo que podemos saber sobre este aspecto de la nueva
naturaleza. Es llamada así porque, el pensamiento así conectado con ésto es,
que viene de Dios. Dios es el Creador y Dador de la nueva naturaleza.
Es "nuevo" en contraste con el viejo. Es
"espíritu" porque está en oposición a la "carne." Es
"interior" en contraste con lo "exterior." Es
"mente" en contraste con el cuerpo. Es pneuma-Christou o
hijo-espíritu, en oposición a un espíritu de la esclavitud. Y es pneuma Theou o
espíritu Divino, porque es, de Dios; y es engendrado "no de sangre"
ni de la voluntad de la carne, ni de voluntad de hombre, sino de Dios" (Juan 1:13).
Aquellos, que son así engendrados, son, y tienen el derecho de
ser llamados, "hijos de Dios." Los dos versos en Romanos 8, en el que es usado este título de la nueva naturaleza (9 y 14), nos dice todo lo que podemos aprender de este aspecto: Verso 9, "Mas no vivís según la carne, sino en [pneuma], si es
que el, pneuma Theou mora en vosotros." Verso 14, "Porque todos
los que son guiados por el pneuma Theou, estos son hijos de Dios" (como en
Juan
1:12,13). Ésto completa los títulos de la
nueva naturaleza; y de ellos aprendemos las preciosas verdades reveladas. Cada
título tiene su propio aspecto, y trae algunas enseñanzas especiales conectadas
con él. Como nosotros primeros dimos los títulos y características del viejo
hombre, y entonces su carácter y final; así ahora hemos dado los títulos y
características de la nueva naturaleza, y reservaremos nuestros comentarios en
su carácter y final para nuestro próximo capítulo.