LA OBRA MAESTRA No 50
Dios Representándose por medio de Su Hijo
26 de Febrero, 2006
Pastor, Brian Kocourek
1. Esta mañana en nuestro estudio de este mensaje del
Hermano Branham llamada la Obra Maestra, continuaremos para ver cómo el hermano
Branham habló del Hijo de Dios de la perspectiva de Dios, en lo que Dios vio en
Su hijo y el deleite que a Dios le tomó. Hemos también visto en este mensaje
cómo Dios trajo a Su Hijo y lo perfeccionó hasta que Dios mismo caminó en este
Hijo y clamó, “Este es mi Hijo
amado, en quien tengo complacencia; a él oíd.”
2. Ahora, esta
mañana me gustaría examinar más estrechamente algo que él dijo en el párrafo
75.
3. LA OBRA MAE
Ahora. Este pensamiento que dijo aquí, “Pero cuando El vino en la Cabeza, El era
toda la imagen de Dios, El se estaba
representando.”
Este pensamiento es tan diferente de lo que ha tomado
la Cristiandad moderna. Después de todo, la comprensión del hermano Branham de la
Deidad en ninguna manera se conforma al concepto Trinitario que se incorporó de
la tríada babilónica pagana durante el tiempo de Constantino y el Concilio a
Nicea. Constantino quería la armonía entre el pueblo cristiano, y allí habían
crecido dos facciones en el movimiento cristiano que tomó posiciones fuertes en
dos posiciones extremas. Unos creyendo en un concepto Unitario de Dios y el
otro creyendo en el concepto Trinitario apropiado de la tríada babilónica. Bajo
Constantino el concepto Trinitario prevaleció y pronto llegó a ser la norma teológica
tratada acerca de la Deidad.
William Branham, profeta de Dios dijo que la creencia
Trinitaria es del Diablo. De su sermón Apocalipsis Capítulo 4 Parte 3 Trono de Misericordia
61-0108 P: 174
dice, Ahora, mí precioso hermano, sé que esto es una cinta
también. Ahora, no se exciten. Permítanme decir esto con el amor de Dios, la
hora se ha acercado en que yo ya no puedo quedarme quieto sobre estas cosas,
estamos demasiado cerca de la Venida. ¿Ven? “¡Trinitarianismo es del Diablo!”
Digo eso ¡ASI DICE EL SEÑOR! Miren de donde vino. Vino del
Concilio de Nicea cuando la iglesia Católica llegó al poder. La palabra
“trinidad” ni siquiera es mencionada en todo el Libro de la Biblia. Y en cuanto
a tres Dioses, eso es del infierno. Hay un Dios. Eso es exactamente correcto.
Ahora, esas son palabras fuertes, pero son sostenidas
por, “Así dice el Señor.” Así que aquellos hombres que se paran contra William
Branham diciendo esto, ellos han tomado su posición con satanás. Y no hay
sorpresa, porque si ellos reconocieran a William Branham como el profeta de Dios,
tendrían que aceptar este “Así Dice el Señor.” Pero ya que se atrincheran así
en su religión falsa de ninguna manera reconocen la Verdad cuando aquello viene.
¿Y entonces qué sobre los Unitarios o los Sólo Jesús?
Bien, ¿escuchemos qué es lo que Hermano Branham tuvo que decir sobre ellos?
Apocalipsis Capítulo Uno 60-1204M P: 175 Ahora, en el Concilio de Nicea, ellos llegaron a dos grandes decisiones
sobre la… Oh, muchos de ellos en ese día eran de los padres de la iglesia
primitiva. Ellos tenían dos ideas
extremas. Una de ellas era de un Dios trino, un trinitario. Y la otra era de un Dios. Y los dos llegaron a existencia y salieron en dos ramas
rectas, así de esa manera. Los de la trinidad llegaron a un punto de una
persona en tres dioses. Los de la Unidad
llegaron al punto del unitarismo, tan equivocado como lo estaba el otro.
Así que los dos se fueron en ramas, pero aquí nos es revelada la Verdad. Jesús
no podía ser Su propio Padre.
Ahora, fíjense donde él dijo la Verdad puesta, “Jesús no podía ser
Su propio Padre.” Por lo tanto si el concepto de la Unidad o el
Unitario están tan mal como lo fue el otro y aquel que dijo que era del diablo,
¿entonces no sería el otro mucho más del diablo? Ahora, William Branham Profeta vindicado de
Dios dijo ambos el Trinitario y el Unitario están equivocados. Ahora Ud. no
puede equivocarse y estar correcto al mismo tiempo. Una palabra quitada es el
del reino de Satanás, y ya que el concepto de “Dios en
una Trinidad es del Diablo,” entonces la creencia del Unitario así mismo tiene
que ser del diablo también.
Por lo tanto este pensamiento que examinaremos esta
mañana dada para ver en si estamos para entender mejor la relación entre el
Padre y Su Hijo Unigénito.
Ahora, William Branham profeta de Dios, Vindicado por
Dios, dijo en el párrafo que 75 de este sermón llamada
la Obra Maestra, “Pero cuando El
vino en la Cabeza, El era toda la imagen de Dios, El se estaba representando,”
Ahora, si Ud. tiene una mente Unitaria entonces cuando
Ud. lee esto parecería como que Dios llega a ser Su propia Obra Maestra, pero
no es lo que dice eso en lo absoluto.
Lo que Hermano Branham dice aquí es que cuando Dios
vino en esta imagen que él hizo, Dios actuó en tal manera que por medio de esa
imagen cuando se vio las acciones de esa imagen se vio a Dios, y cuando se oye
esa imagen se oye a Dios, porque esa imagen llegó a ser un reflejo perfecto de
Dios.
En 1 Juan 5: 10 leímos, El que cree en el Hijo de Dios, tiene el
testimonio en sí mismo; el que no cree a Dios, le ha hecho mentiroso, porque no
ha creído en el testimonio que Dios ha dado acerca de su Hijo.
Así que aquellos que no creen que hubo una persona
real que era el “Hijo de Dios” como distinguido de la persona que fue “Dios el
Padre” no han creído lo que Dios dijo, “Éste es mi Hijo amado,” y por lo tanto ellos
llaman a Dios un mentiroso.
Ahora, hay de aquel que llamaría a Dios un mentiroso.
No quisiera estar en los zapatos de ese hombre en el día del juicio.
Ahora, volviendo a lo que hermano Branham dijo, yo
quisiera que se den cuenta de esas palabras, El se
estaba representando.
Ahora, no hay nada chistoso sobre lo que Hermano Branham
dice aquí. El dijo, Pero cuando El vino
en la Cabeza, (En otras
palabras la Obra Maestra vino y luego Dios entró en esa Obra Maestra. Entonces)
El era toda la
imagen de Dios. (En otras palabras, cuando la plenitud de la Deidad
entró en Él en el Jordán, entonces la imagen llegó a ser “toda la imagen de
Dios.”) Así que cuando Dios caminó en ese cuerpo y empezó a decir al Hijo lo
que debe hacer, y lo que debe decir, y donde ir, y cuando hablar, entonces Dios
estaba en Cristo reconciliando el mundo así mismo. Y cuando Dios estaba en
Cristo trabajando y actuando, entonces El se estaba
representando en ese cuerpo."
Cuando yo escribí el Estudio del Melquisedec hace años
atrás, dije en aquel tiempo, yo creo que Dios está en Su Hijo mostrando a Su
hijo qué hacer, qué decir, qué doctrina predicar, etc. En esencia Dios estaba
en Su Hijo mostrándole a Él cómo actuar Su papel como un hijo obediente. Y
mucho más allá yo creo lo que Jesús dijo sobre las cosas que podría hacer y no
podría hacer. Y cuando Jesús sanó en el día del Reposo porque Dios le dijo a
donde ir, y para quien orar, y qué hacer y luego qué decir, encontramos a los
judíos queriendo librarse de él.
En Juan 5: 16 Y por esta causa los judíos perseguían a
Jesús, y procuraban matarle, porque hacía estas cosas en el día de reposo. Juan 5: 17 Y Jesús les respondió: Mi Padre hasta ahora trabaja, y yo trabajo. 18 Por esto los judíos aun más procuraban matarle, porque no sólo
quebrantaba el día de reposo,* sino que también decía que Dios era su propio
Padre, haciéndose igual a Dios.
Ahora, noten que Jesús no dijo que él era Dios, sino
que Dios era Su Padre, y fueron los judíos quienes dijeron que él se hacia
igual con Dios porque decía que Dios era Su Padre.
En el Evangelio de Juan y 10 vemos
la misma cosa de nuevo otra vez. Juan 10: 32 Jesús les respondió: Muchas buenas obras
os he mostrado de mi Padre; ¿por cuál de ellas me apedreáis? 33 Le respondieron los judíos,
diciendo: Por buena obra no te apedreamos, sino por la blasfemia; porque tú,
siendo hombre, te haces Dios. 34 Jesús
les respondió: ¿No está escrito en vuestra ley: Yo dije, dioses sois? 35 Si llamó dioses a aquellos a quienes
vino la palabra de Dios (y la Escritura no puede ser quebrantada), 36 ¿al que el Padre santificó y envió
al mundo, vosotros decís: Tú blasfemas, porque
dije: Hijo de Dios soy? (Ahora,
quisiera que capte lo que Jesús dice luego.) 37 Si no hago las obras de mi Padre, no me creáis. 38 Mas si las
hago, aunque no me creáis a mí, creed a
las obras, para que conozcáis y creáis que el Padre está en mí, y yo en el
Padre. 39 Procuraron otra vez
prenderle, pero él se escapó de sus manos.
Lo que Jesús está dice aquí es, “Miren amigos, no tomen mi palabra para eso,
miren las obras. Ningún hombre puede hacer lo que hago, y no soy yo el que hace,
es mi Padre que mora en mí, El hace las obras, son sus obras y ningún hombre
puede hacer estas cosas.”
Pero realmente para formar estos hijos del diablo no tuvieron
cuidado de lo que este hombre estaba haciendo ningún otro pudo hacer, El estaba
desafiando su autoridad y a ellos no les gustó eso. Es por eso que ellos
trataron de apedrearlo.
Y en Juan 5: 19 Jesús dijo, Respondió entonces Jesús, y les dijo: De
cierto, de cierto os digo: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también lo hace
el Hijo igualmente. 20 Porque el Padre ama al Hijo, y le muestra todas las cosas que él hace; y mayores obras que estas
le mostrará, de modo que vosotros os maravilléis.
Así que Ud., Jesús estaba sólo haciendo lo que el Padre
estaba mostrando por medio de la visión qué hacer. Por lo tanto las cosas que
Jesús hacía eran acciones basados en lo que vio el Padre hacer. Entonces lo que
la gente vio eran el Padre en acción, pero lo que Dios hacía era mostrando a Su
Hijo qué hacer, y qué decir, etc.
Y de nuevo vemos en Juan 5: 30 No puedo yo
hacer nada por mí mismo; según oigo, así juzgo; y mi juicio es justo, porque no
busco mi voluntad, sino la voluntad del que me envió, la del Padre.
Ahora, examinando cómo ese Dios estaba en Cristo mostrándole
qué hacer y qué decir, hemos visto que las Escrituras nos muestran que Jesús sólo
hacía lo que Dios mostraba qué hacer, En otras palabras, sus acciones fueron un
resultado de lo que El vio a Dios hacer.
Y el Hermano Branham nos enseñó que realmente lo que
Jesús vio estaba en una visión lo que Dios estaba haciendo.
JEHOVÁ
PROVEERÁ 56-0429 053 Escuche lo que El dijo. San Juan 5:19: “De cierto, de cierto, os digo: No puede el Hijo hacer nada por sí
mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también
lo hace el Hijo igualmente.” ¿Eso es lo que El
dijo? “Yo no hago nada hasta que el Padre me muestra una visión, de qué
hacer primero”.
Ahora, comprender que Jesús fue dependiente de las visiones
de Dios, miremos lo próximo a lo que él habló. Miremos por un momento esas
escrituras que nos dicen que Jesús sólo habló lo que Dios le dijo que hablara.
Juan 8: 38 Yo hablo lo que he visto cerca del Padre; y
vosotros hacéis lo que habéis oído cerca de vuestro padre.
Fíjense que Jesús de nuevo nos dice aquí que aún las
cosas que él habló fueron dadas por Dios Quien le había mostrado en una visión
qué decir. Ahora, eso no fue diferente con el hermano Branham. Dios le
mostraría la visión y luego decirle qué decir, y seguir lo que él dijo con “Así Dice el Señor.”
De nuevo leímos en Juan 8: 28 Les dijo, pues,
Jesús: Cuando hayáis levantado al Hijo del Hombre, entonces conoceréis que yo
soy, y que nada hago por mí mismo,
sino que según me enseñó el Padre, así hablo. De manera que aquí vemos que Jesús
fue dependiente en el Padre de enseñarle qué decir de modo que él pudiera
decirnos esas cosas.
De nuevo en Juan 12: 49 Porque yo no he hablado por mi propia
cuenta; el Padre que me envió, él me dio
mandamiento de lo que he de decir, y de lo que he de hablar. Jesús no fue soberano en las cosas
que él dijo y que él enseñó, sino fue ordenada por Dios qué decir y qué enseñar.
Luego en el próximo versículo oímos lo que él dice, Juan 12: 50 Y sé que su
mandamiento es vida eterna. Así pues, lo
que yo hablo, lo hablo como el Padre me lo ha dicho. Fíjense Jesús declaró sus razones de repetir lo que
Dios le dijo que diga. El dijo porque sus mandamientos son vida.
Y una vez más vemos en Juan 14: 10 ¿No crees que
yo soy en el Padre, y el Padre en mí?
Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el
Padre que mora en mí, él hace las obras. Y de nuevo aquí vemos que Jesús nos hace conocer que
las palabras que él habló fueron hechas por Su Padre que moraba en El. Eso es
lo que le hizo diferente de un profeta. Un profeta dice lo que Dios le dice que
diga, pero puesto que Dios estaba en Jesús mostrándole a El qué decir, entonces
Jesús no tenía que decir “Así Dice el Señor” como los profetas de Dios lo hacían.
Pero puesto que Dios estaba en Jesús haciendo y hablando, entonces era la voz
de Dios al pueblo.
JEHOVÁ
PROVEERÁ 56-0429 053 “Esa es la razón que la gente no podía
entenderle. Algunas veces era Cristo hablando... o era el Hijo hablando. Otras
veces era el Padre hablando. El era una Persona dual. El era un Hombre,
el Hijo. Dios estaba dentro, el cual estaba tabernaculizándose en El.
¿Pero qué hizo El? Fue alrededor diciendo; “Yo soy el Sanador” Muy por el
contrario, El dijo, “Yo no soy el Sanador” El dijo, “No soy yo el que hace las
obras; es Mi Padre el que mora en mí” Y en San Juan el capítulo 19, cuando El
fue cuestionado porque pasando por un montón de lisiados, cojos, marchitos,
personas ciegas, sanó a un hombre tumbado sobre el lecho, el Padre Le mostró
ir allí y sanar. Se alejó caminando, dejando al resto de ellos allí, ellos
Le preguntaron. Un hombre empacó su cama en el sábado. Escuche lo que El dijo.
San Juan 5:19: “De
cierto, de cierto, os digo: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino
lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también lo hace el
Hijo igualmente.” ¿Eso es lo que El dijo? “Yo
no hago nada hasta que el Padre me muestra una visión, de qué hacer primero”.
Y en cuanto a Su doctrina Jesús dijo en Juan 7: 16
Jesús les respondió y dijo: Mi
doctrina no es mía, sino de aquel que me envió. 17 El que quiera hacer la
voluntad de Dios, conocerá si la doctrina es de Dios, o si yo hablo por mi propia cuenta.
Pablo nos dice en el libro de hebreos que Dios le llamó
a Jesús al sacerdocio de Melquisedec, y luego Pablo informa es que Jesús tuvo
que aprender la obediencia a esta llamada. Por lo tanto podemos ver que Dios
jugó el papel de Melquisedec en el Antiguo Testamento con el propósito de darle
instrucción a Su Hijo que cuando Jesús viniese al lugar de madurez, tomaría
este papel de Sumo sacerdote y seguir en el ejemplo de Su propio Padre. Es por
eso que vemos tantas escrituras donde Jesús admite que no puede hacer nada y
decir nada sino lo que Dios le mostraba hacer y decir.
Así que volviendo a nuestro texto, oímos al hermano
Branham decir, “Pero
cuando El vino en la Cabeza, El era
toda la imagen de Dios, El se estaba
representando, “Porque Dios estaba en
Cristo reconciliando consigo al mundo.”
Inclinemos nuestras cabezas en oración.
Traducido por Hno. Mario Nina Q. Febrero de 2006 – La Paz Bolivia
E mail: marionina357@yahoo.com